Garantía Personal: cobrar a su deudor americano o a alguien más

¿Se ha preguntado quién le responde si su deudor en Estados Unidos no le paga la deuda o factura?, ¿Le deben dinero en Estados Unidos?, ¿Están garantizados los negocios que usted hace con empresas de EE. UU.? Es importante revisar estos aspectos si usted exporta productos o servicios desde Latinoamérica, especialmente si tiene poco conocimiento sobre las leyes comerciales americanas, por lo que en este blog conocerá de qué se trata una garantía personal y si le conviene.

Los negocios requieren de seguridad para finalizar en buenos términos. Si no hay condiciones que transmitan esa sensación, es mejor en muchas ocasiones que la transacción no se lleve a cabo.

Las garantías personales están hechas como una manera de otorgar esa seguridad en el mundo mercantil internacional y de las deudas comerciales, así que conozca más sobre ellas, y especialmente sobre la Garantía Personal.

 

¿Qué es la Garantía Personal y cuándo suele establecerse?

 

Lo primero que debemos hacer es conocer a secas qué es una garantía de cualquier tipo, por lo que podemos decir que es cualquier compromiso que se hubiere firmado con la función de que disponga el pago contra presentación de un requerimiento conforme.

Ahora bien, una garantía personal puede definirse como aquella obligación asumida por una persona que asegura o garantiza el cumplimiento de las obligaciones de otra persona o empresa.

Es decir, una garantía personal implica que una persona otorga la garantía, se le denominará como garante, avalista o fiador, y ella misma será responsable de cumplir con la obligación de otra persona en caso de que ésta última no lo haga. En otras palabras, se hace responsable subsidiariamente.

Las garantías personales suelen funcionar en contratos comerciales como, por ejemplo, los préstamos bancarios, donde los directores de una compañía responden por las obligaciones que tiene la empresa que representan.

Además, a través de este acuerdo, un acreedor tiene la posibilidad de perforar el velo corporativo e imponer las obligaciones de la compañía a los directores, lo que es significativamente relevante para los acreedores y exportadores de países como Uruguay, Paraguay, Bolivia, Panamá, Cuba o El Salvador, sobretodo en esos casos donde tratan con nuevos clientes corporativos con quienes no han tenido tratos antes y pueden tener dudas sobre la capacidad.

 

imagen de garantía personal

 

Garantía Personal vs. Garantía Real

 

Para poder hacer una distinción entre garantía personal y la garantía real, debemos establecer primeramente una conceptualización de ambos términos.

Así encontramos que la garantía real es aquella que permite al deudor responder frente a su acreedor con sus bienes en caso de no pagar a tiempo la deuda, en cambio las garantías personales son aquellas que se caracterizan porque otro sujeto aparece como garante para de esa manera responder con su propio dinero o patrimonio la deuda.

De esa forma, pudiéramos considerar que las garantías reales son medidas que buscan satisfacer a un acreedor que está facultado para cobrar algo que se le adeuda, otorgándole seguridad mediante ciertas medidas sobre un haber económico. En este caso, cuando exista un incumplimiento de parte del deudor, el acreedor podrá atacar contra el bien, tangible o intangible, que fue otorgado como garantía.

Es importante entender algo: que tanto las garantías personales como las reales, tienen ventajas y desventajas dependiendo del ángulo desde el cual se observen. Por ejemplo, las reales son una figura que van en conjunto con el crédito que están garantizando, siendo además un derecho indivisible de garantía que a la hora del cobro de la deuda tiene un derecho preferencial.

Si pasamos al aspecto que las distingue, en lo esencial, encontraríamos que en el caso de la garantía personal hay un sujeto que debe responder (además del deudor) por la deuda que éste hubiere contraído, mientras que en la real, hay un bien que queda atado y con una preferencia particular, especialmente frente a otros acreedores de su deudor.

De esa manera, llegamos al punto de señalar que en el caso de una venta a crédito para el deudor es mucho más conveniente otorgar una garantía real, mientras que para el acreedor resulta mucho más interesante y le otorga mayor seguridad que la garantía personal sea la otorgada. ¿Por qué? Porque en la primera se va contra los bienes del deudor y este podría deshacerse de estos antes de que usted, como acreedor y dueño de la deuda por cobrar, efectivamente le cobre, y en la segunda se va contra un responsable secundario de la deuda e incluso contra los bienes de este último.

 

Tipos de Garantía Personal

 

Para conocer los tipos de garantía personal, hay que conocer la esencia de dos figuras: el aval y la fianza. La primera recoge los casos donde alguien garantiza mediante un documento cambiario, mientras que la segunda surge cuando no se consigue a alguien que pueda garantizar los instrumentos señalados.

Así encontramos que la fianza tiene entre sus derivadas la civil ordinaria, que es la que se puede reclamar solamente si el deudor principal de la operación no cancela; cuando el fiador responde de manera solidaria por la deuda, se le denomina fianza solidaria, valga la redundancia; la bancaria, es cuando el que se presta como fiador es una institución de la banca; mientras que la mercantil es aquella que cuando en el trato está una compañía, un socio de la misma se presta como fiador.

 

¿Cómo ejecutar la Garantía Personal?

 

La garantía personal, para ser ejecutada, debe cumplir con todas las formalidades establecidas por la ley, ya que incluso cuando hubiere documentación de por medio, si el garante no tenía conocimiento claro de la operación que estaba validando, esto pudiera llevar a que la garantía quede anulada y que como acreedor usted pueda perder y no recuperar su dinero en Estados Unidos.

Es por ello que para ejecutar satisfactoriamente la garantía personal, se recomienda acordar un negocio donde este y otros aspectos o elementos se maneje eficientemente, por lo que si usted cuenta con la asesoría de un abogado de cobro de deudas muy experimentado en esa área de EE. UU., pues las probabilidades de salir ganando de esa transacción son mayores, ¿o no?

Si desea una consulta gratuita con el abogado que le ayudará a recuperar su dinero, no dude en llamar ahora o enviarnos un mensaje antes de que se siga complicando su caso.

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